El sistema que considero ideal debe proteger los 3 círculos de seguridad, así el intruso podrá ser detectado antes de que toque los muros de la vivienda, siempre que se haya diseñado correctamente el sistema y se haga un correcto uso de él. Es vital, que en la fase de diseño se dé la misma importancia a la elección de los elementos del sistema como a su configuración, de forma que se adapte lo máximo posible a los hábitos del usuario final.
A continuación describo los elementos que instalaría en cada zona de seguridad:
Círculo perímetro exterior
En esta zona de seguridad los elementos a incorporar al sistema serían las barreras infrarrojas o por microondas para la zona más alejada de los muros, de forma que se cree un “muro virtual” que al ser atravesado por una persona active el sistema. Como los elementos de detección exterior son más vulnerables que los interiores, son un complemento perfecto los detectores de exterior con doble tecnología de detección instalados de forma estratégica para crear una segunda línea exterior de detección, en este caso en la zona cercana o pegada a los muros de la vivienda.
Círculo perímetro interior
En esta zona compuesta por los muros, puertas y ventanas, montaríamos contactos magnéticos en todas y cada una de las puertas y ventanas, añadiendo un detector de rotura de cristal en cada puerta o ventana que incluya cristales. Además, para detectar intrusiones con la técnica del butrón, lo ideal serían sensores de vibración o sísmicos en los muros de forma que activen el sistema si un intruso intenta utilizar esta técnica para acceder a la vivienda.
Círculo interior
Esta zona tiene más riesgos además de la intrusión y es relativamente sencillo reducirlos mediante la instalación de otros tipos de sensores. Para proteger esta zona ante intrusiones, la mejor opción son los ya clásicos detectores PIR, colocando uno con doble tecnología de detección en zonas conflictivas como garaje o trasteros donde se puedan producir cambios bruscos de temperatura producidas por posibles corrientes de aire o maquinaria. Los PIR deben instalarse como mínimo en las estancias principales y en zonas de paso. Para minimizar el riesgo de incendio, complementaria esta zona con detectores de incendio para cocina, garaje, cuarto de calderas y cuartos técnicos. Para reducir el riesgo de exceso de CO2, en el garaje colocaría un detector de exceso de CO2. Y para reducir el riesgo de inundación colocaría un sensor de inundación en cocina, baños, zona de calderas y maquinaria para piscinas.
Este sistema de detección lo complementaría con un sistema de CCTV (Circuito Cerrado de TV) y realizaría una integración para que en los casos de activación de la intrusión, el sistema de CCTV enviase un clip de video al usuario final de la cámara asociada al sensor.
Todo el conjunto debería poder ofrecer servicios en la nube para poder gestionar tanto el sistema de alarma como el sistema de cámaras (CCTV) desde smartphones, tablets y ordenadores desde cualquier parte del mundo.
El diseño de este tipo de sistemas sólo puede realizarlo personal cualificado como lo son los asesores o consultores en seguridad electrónica. Pida asesoramiento de profesionales para tener la garantía de un correcto diseño e instalación de su sistema de seguridad.