Cuando digo la alarma de la alarma me refiero a la forma que tienen los sistemas de seguridad de autoprotegerse. ¿Qué es esto de proteger el sistema de alarma? Pues se trata de los mecanismos antisabotaje que poseen todos los sistemas, que en muchos casos son configurados y aplicados por defecto desde fábrica, pero en otros casos, sobre todo los más antiguos y cableados, se debía habilitar esta función de forma manual.
Así es, hoy podemos afirmar que los centros de control de seguridad portátiles son una realidad. Actualmente, existen sistemas que nos brindan la posibilidad de poder controlar desde nuestro teléfono inteligente la seguridad de nuestro hogar o negocio. Cada vez más, y gracias a los avances en las telecomunicaciones, los fabricantes acompañan sus productos de aplicaciones para usar junto con nuestro smartphone y poder controlar el equipo de forma remota.
La razón de titular este artículo con una afirmación tan ridícula, a priori, es porque es posible tener un sistema de seguridad que funcione sin intervención del usuario. Uno de los problemas a los que se encuentra el usuario de los sistemas de alarma es la incomodidad de tener que acordarse de armar el sistema antes de cerrar la tienda, el taller, la oficina,... es decir, el negocio.
A veces puede suceder que tengamos a un amigo de lo ajeno como compañero de trabajo. Y si además, en nuestro lugar de trabajo utilizamos vestuarios, existen posibilidades de que este compañero amigo de lo ajeno intente abrir alguna de las taquillas o mochilas que se encuentre.
Un buen sistema de alarma debe garantizar la seguridad de nuestros seres queridos cuando estamos en casa. Para esto, es imprescindible contar con un sistema de seguridad perimetral, de forma que el sistema nos alerte antes de que el intruso llegue siquiera a tocar fachada de nuestro hogar.
¿Qué servicios ofrecen las centrales receptoras de alarmas (C.R.A.)? Veamos los principales servicios con los que podemos encontrarnos: