A la hora de diseñar un sistema de seguridad basándonos en los 3 círculos de seguridad, el perímetro interior se vuelve una zona imprescindible para proteger, ya que permite al usuario estar protegido estando dentro del inmueble sin peligro de activar el sistema.
Vamos a recordar qué elementos componen el perímetro interior:
Los detectores de rotura de cristal nos ayudan a proteger el perímetro interior de los 3 círculos, o anillos, de seguridad. Se trata del complemento perfecto a los contactos magnéticos, ya que si en lugar de forzar una ventana o puerta acristalada, el intruso rompe el cristal, el contacto no será abierto y no se producirá la señal de alarma.
El contacto magnético es el elemento de detección más básico y simple que forma parte de los sistemas de seguridad electrónica. Se trata de un interruptor reed (reed switch) o de lengüeta, que no es más que un par de contactos ferrosos encerrados al vacío dentro de una cápsula de vidrio para que mantengan sus propiedades con el paso del tiempo.